Seis situaciones perfectas para practicar la conducción preventiva

• 17/02/2021
• Seguridad

• consejo accidente conducción riesgo

La conducción preventiva, es decir, la que te permite anticiparte a lo que va a ocurrir en la vía para reaccionar de la manera más adecuada, es muy importante para la seguridad vial. Y es en ciertas situaciones como los adelantamientos o las intersecciones complicadas cuando más te puede ayudar.

Por esta razón, la DGT ha recopilado seis situaciones en las que la conducción preventiva te puede resultar de especial ayuda:

- Adelantamientos: observa hacia delante (vital en vías de doble sentido) y hacia atrás por los retrovisores interior e izquierdo. Vuelve a la derecha cuando veas al vehículo adelantado por los espejos derecho e interior, para mantener la separación adecuada.

- Incorporaciones: en los cambios de carril y las incorporaciones a otra vía, es necesario que observes para asegurarte de que no hay otros vehículos en el lugar al que te quieras desplazar. Los ángulos muertos pueden complicar estas maniobras, así que vigílalos girando ligeramente la cabeza.

- Glorietas: cuando circules por el carril exterior de una plaza circular, vigila el retrovisor izquierdo para ver si algún vehículo se aproxima por ese lado: si un conductor intenta cruzarse desde el interior –es decir, antirreglamentariamente–, podrás anticiparte a una colisión.

- Intersecciones complicadas: en las intersecciones señalizadas con Stop o semáforos, detén siempre el vehículo y observa si otros se aproximan, para ceder el paso. En los giros, observa además que nadie viene de frente y que no hay peatones u otros usuarios cruzando la vía.

- Pasos para peatones: en la aproximación a un paso de peatones, haz un barrido visual de lado a lado varias veces. En el caso de que un obstáculo te impida ver bien, aminora la marcha y pasa a una velocidad sin riesgo de atropello.

- Salir del coche: ya seas conductor o pasajero, recuerda que en el momento de salir del vehículo en una calle, antes de abrir una puerta del lado de la calzada, debes girarte hacia atrás para comprobar que no se aproximan vehículos, ciclistas o peatones.

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